La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ubicó un caso en el que personas de nacionalidad china aparentemente participan en lavado de dinero para el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

El titular de la unidad, Santiago Nieto, dijo que se encontró una red de chinos que importan a México zapatos a un precio por debajo de su valor real y, además, reciben cantidades importantes de recursos en efectivo, por lo que se piensa que es un mecanismo de lavado de dinero del grupo delictivo.

“En zapatos, tenemos un caso de personas de nacionalidad china que introducen producto a León, muy raro, con precios por debajo del valor, y reciben cantidades importantes en efectivo. Pensamos que es un mecanismo de lavado de dinero del Cártel de Jalisco”, expuso.

Durante la firma de un acuerdo con la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), el funcionario dijo que se atienden los casos de corrupción en aduanas, subvaluación y piratería, por lo que invitó a los empresarios a establecer una mesa de trabajo para que conozcan cómo se realiza la ingeniería de datos sobre esos ilícitos.

Pide superar polarización

Además, Nieto mencionó que en México no puede seguir la polarización ni mantenerse las discusiones sobre chairos y fifís, pues se necesita fortalecer las coincidencias y trabajar por ellas.

El funcionario dijo que la UIF no persigue empresarios, sino busca información para armar casos contra personas que cometen ilícitos.

Asimismo, pidió a los empresarios denunciar a empresas fachada que conozcan porque dañan al país.

Por ello, pidió a los empresarios proporcionar información de este tipo de compañías fraudulentas para “generar casos contra quienes realmente comenten el delito”.

Expuso que la UIF busca “convertirse en un mecanismo para poder apoyar a los sectores y, bajo ninguna circunstancia, como un obstáculo, como una institución que se piense que va a perseguir al empresariado”.

Por su parte, el presidente de la Concamin, Francisco Cervantes, dijo que coinciden en que es necesario combatir ilícitos como el robo de combustible, la corrupción, empresas fachada y factureras.

“Si alguien está a favor del Estado de derecho, y le afecta lo que daña el sano desarrollo de la economía, es a la industria. De ella dependemos más de 8 millones y medio de trabajadores formales y nuestras familias, agrupadas en pequeñas, medianas y grandes empresas”, recalcó.